►'Conker's Bad Fur Day' fue, es y será la madre de todo lo absceno en el mundo videojueguil. Nacido del portentoso ingenio de mi compañía favorita, Rareware, no consigo entender todavía como consiguió pasar la censura en America con lo delicados que se han vuelto con estas cosas al pasar los años.
Lleno de chistes guarros, insinuaciones a las drogas y humor negrísimo slasher, el cartucho de la N64 se convirtió en lo "most wanted" dentro del catálogo de la consola. El juego nos dejó una historia absurda espectacular que aún hace que me parta el culo con ella y algo que no muchos conocen: una propaganda la mar de ingeniosa.
Para empezar, estos anuncios fueron tan políticamente incorrectos que solo aparecieron en las revistas Playboy y Maxim, dado que el juego estaba también catalogado para mayores de edad, y se muestra como unos simples dibujos para colorear infantiles con ese toque tan gracioso Conker. Irreverente y maleducado, pero con cuanto estilo, colegas.
Tras un remake más que digno, volvimos a ver a la ardilla formando parte del proyecto Spark de Microsoft (para mi pesar, ésta mascota tambien pertenece a esa apestosa compañía) pero solo como embajador y conejillo de indias para demostrar las posibilidades del software.
'Conker's Big Reunion' fue el resultado de este experimento, un juego episódico que se mueve con la potencia del Spark que de momento solo tiene un capítulo, y aunque luce espectacularmente bien no innova ni en mecánica, ni en animación y su historia es un vacío legal en toda regla. Solo el giga-robo-teddy al que le tienes que dar en los cojones inflamados se salva.
Veremos si se pone interesante la conker cosa, pero viendo el sistema de micropagos y la intención de Microsoft de hacer un universo con tantas posibilidades, la esperanza debemos depositarla en los fans que en más de una ocasión han demostrado que le pegan diez mil vueltas en ingenio a las compañías grandes. Hermanos, dadle a la ardilla un juego por el que estar orgullosos.
Que te jodan mucho, Microsoft. Espero que te pirateen el invento que no has sabido aprovechar.
Volviendo al tema de antes, que me disperso. Los anuncios de videojuegos de antes, sí que eran puras joyas y no esa chufa del de Destiny...