Si algunos juegos tienen tiempos de carga infinitos entre zonas o conversaciones que se hacen eternas por su desquiciada lentitud, 'Shenmue' tiene otro record mundial de cansinez.
Cada vez que se nos antojaba que el Ryo se tomase una de esas bebidas de marca blanca, de dudoso contenido, nos quitaba prácticamente un minuto de vida. Parecerá una exageración dicho así, pero fijaos bien si no se hace largo ni nada acostumbrados a que actualmente en los videojuegos tardamos pocos segundos en tomarnos una poción. La parte más tediosa del realismo que desprende esta saga. Te da tiempo casi de ir y volver de mear.